Hace unos días mis padrinos me han llevado a conocerla, estaba en esa caja cuadrada que casi no me dejan ver y no paraba de moverse, ya es un peso pesado de 354 gramos. Aunque tendré que esperar hasta finales de agosto para poder jugar con ella.
Hace unos días mis padrinos me han llevado a conocerla, estaba en esa caja cuadrada que casi no me dejan ver y no paraba de moverse, ya es un peso pesado de 354 gramos. Aunque tendré que esperar hasta finales de agosto para poder jugar con ella.
La primera vez que me presentaron al peluche grande se asustó tanto que salió disparado, huyendo de mí, como se huye de una vara verde. Coco es como Sparrow: un poquito raro; creemos que no es consciente de lo grande y fuerte que es, incluso tenemos dudas de que sea consciente de que es un perro.
Coco es un ser travieso y desobediente, independiente y juguetón,…como te dejes la puerta abierta se las pira a vivir su vida; aunque siempre vuelve, (pero no me gusta que se escape, porque no deja de ser un peluche grande y la gente que se cruza con él se asusta).
Ahora ya no me tiene miedo, se acerca a mi Bugaboo, lo olisquea, me olisquea a mí y a veces hasta se atreve a lamer mis piececillos…lo que no me gusta nada es que se atreva a robarme mis peluches, (como si no tuviese los suyos propios).
El peluche pequeño es como una cola de lagartija: hiperactivo. La primera vez que me vio me ignoró totalmente, pero la segunda vez me olisqueó toda e incluso se atrevió a darme un lengüetazo en toda la cara; ahora nos mostramos cierta indiferencia mutua.
Por lo menos Pipo respeta mis peluches.
Heredé el ángel de tu mirada...Ese duende bondadoso que habita dentro de tí y mira a través de tus ojitos ahora también lo hace desde los míos, con esa mirada dulce, serena,...tan llena de cariño.
Heredé el ángel de tu mirada...esa mirada inquieta, juguetona, curiosa, que busca...
Esa mirada generosa, que se ofrece, que desea dar y ayudar...
Pero sobre todo, esa mirada que sonríe, sonríe, sonríe... y no deja de sonreir.
Primero, que eso de los horarios tan estrictos, de lo de la rutina de antes de acostarme, de mis ejercicios matinales en el gym y ese largo etc de cosas tan aburridas que mis padres durante 5 meses se empeñaron en conseguir y que más o menos se cumplían, y ahora, en menos de 5 días se han ido todo por la borda, pobrecitos! y lo que queda, porque ampliamos la estancia en este pequeño paraíso durante una semana más.. yupi!!, papi se irá y me quedo con mami, lo echaremos de menos, sobre todo por la noche, jeje!!
Segundo, aquí, en el paraíso, con que solo diga AAA! aparecen mis 2 abuelos, mi bisabuelo, mi tía y si han venido a visitarme los padrinos, añadimos 2 más!! De repente, tooooo el mundo mirando para mí y eso sí, disputa de que si tú ya la has cogido, que si la tuve poco tiempo, que venga que ahora me toca a mí!! Y así estoy, FELIZ!!
Tercero, mi abuelita, cada vez que ha salido de casa la temo, porque viene cargadita de regalos: mordedores, piscina, flotador…supongo que es la ventaja de ser la primera nieta, tengo que aprovechar que pronto llega mi primita Lola, que por cierto, voy a verla el martes en ese aparato cuadrado que tanto me gusta y que casi ni me dejan ver, bueno , eso era antes porque aquí si puedo!!
Cuarto, mi bisabuelo Marcial cada vez que llega a casa me trae un ramito de flores, tenemos la casa con overbooking de flores, está preciosa!!
Pues esto es en lo que ando metida estos días, ahora me voy a cama que mañana celebramos en Ares el Día del Bollo, os adelanto que es una costumbre donde todo el pueblo sube hasta una ermita con un bollo dulce que en medio tiene un huevo cocido envuelto en una servilleta, hay una misa y al finalizar, cuando el cura avisa, todos al unísono levantan el bollo por encima de sus cabezas y el señor cura los bendice y a continuación a comerlo!!! . La tradición dice que si lo comes antes de la bendición, el huevo sangra…jeje!! Como tengo enchufe con el señor de la pastelería me ha preparado uno sin huevo!! JAJA!!
Lo dicho, me voy para cama que mañana va a ser un día ajetreado!!
Espero que ninguno de los vecinos de mi pueblo se enfade conmigo por lo que voy a contar, pero no puedo evitar escribir algo acerca de la conducción de Moaña; o tal vez debiera decir “el pilotaje”.
En Moaña, los coches van por el aire, zumbando que vuelan y si logras ver la cara del piloto dada la velocidad a la que pasa, ves un crío de menos de veinte años en un bemeuve o un audi de trescientos o más caballos.
Van al supermercado, al estanco o a la gasolinera como si fuera a ocurrir que al llegar les agitasen la bandera de cuadros, les diesen una corona de laurel y un trofeo, los fuesen a subir a un podio y a tocarles el himno;...corren tanto que pareciese que lo hacen contra alguien, luchando por llegar primero...que pareciera que el supermercado se fuese a quedar sin comida, el estanco sin tabaco o se fuese a agotar la gasolina en la gasolinera.
Mención aparte merecen los pasos de cebra. En parte relacionado con lo anterior: a la velocidad que circulan, es imposible detenerse en los pasos de cebra para dejar pasar a una mamá con su carrito,...es imposible en ocasiones incluso ver el paso de cebra.
Pero no sólo los inconscientes voladores se saltan el paso de peatones; de los otros vecinos normales, una gran mayoría mira a tu mamá con indiferencia, como si no estuviese allí con el carrito de su bebé esperando para cruzar y sigue de largo sin detenerse como si no la hubiese visto. (Hay algunas honrosas excepciones).
Que no se extrañen ni se ofendan si al pasar sin detenerse oyen a Sparrow o a mí misma recordarles a gritos algo que desconocen acerca de sus madres, o su parentesco con la especie caprina.
Duerme, dulce niña, duerme... Duerme apacible y tranquila, que nada ose turbar tu bendito sueño, que el hada buena que vigila las cunas dedique su valioso tiempo a otras pequeñas; que a la vera de la tuya, mamá custodia tu descanso, para que el enemigo que visita tu tripita no te castigue con su maldad...
Duerme, dulce niña, duerme...duerme serena y relajada, que ninguna pesadilla pasee por tu frente, que el espíritu bueno de tu mami está siempre a tu lado.
Y si en la mitad de la noche precisases desahogarte, echar una lágrima o un grito, o te entrase el apetito,... tú no te preocupes, dulce niña; despierta las veces que sea necesario, que no faltarán en la madrugada brazos para mecerte, porque cada segundo contigo cuenta.
Bueno, tengo que contaros que últimamente, (esta semana), Sparrow está un poco más perezoso y se está perdiendo esos segundos conmigo que cuentan todos y cada uno.
Es mami la que esta semana me atiende en la madrugada. Además, últimamente soy un poco más benévola con ellos y no me despierto a las dos, cinco y ocho; ahora sólo una vez y rondando las seis de la mañana.
Estoy mejorando mi actitud social.