Mary Quant fue una de esas personas que sorprendieron al mundo.
En una época en la que las mujeres jamás vestían pantalón, pero llevaban sayas casi hasta los tobillos; va la chica y se saca un híbrido entre una falda y un cinturón y le llamó minifalda... y lo combinó con botas de caña altíiisima.
Desde entonces muchas chicas transgresoras como yo, con nuestras larguíiiisimas piernas, hemos llevado su invento al máximo esplendor; llegando a convertirlo en arte.