sábado, 6 de diciembre de 2008

Hora de cooomeeeeer.

He oído comentarios de algún “simpático” acerca de que si mami en vez de una preciosa niña, (yo); lo que tuvo fue un pin permanentemente pegado en su pecho,…jiji. Lo cierto es que paso bastante tiempo allí colgada y con bastante frecuencia. Varias son las razones.

Por un lado, teníais que ver la cara que se me queda después de estar un buen rato “xupando” de mami,…parece como si mami tuviese algún tipo de alucinógeno o alguna droga blanda en la leche; me despego con una cara de flipaaaadaaaaa; que ni fumándome un porrito de esos. Papi está preocupado de que no vaya la policía a tomar una muestra de la leche de mami y no acabemos toda la familia en la cárcel: mami por posesión de estupefacientes y tráfico a menores, yo por consumo habitual de sustancias prohibidas y papi por encubridor de negocio lucrativo en torno a la salud pública y consumo de narcóticos. Por otro lado, también cabe la posibilidad de intentar establecer una línea nueva de negocio con algún capo de la droga; (parece que finalmente los vecinos son espías y no traficantes), habría que hablar con algún capo arousano para que además de traficar con cocaína, heroína y resina de hachís; implementara el tráfico de “leche materna”, la nueva droga de diseño de altísima adicción.

Por otro lado, en algún lado me he informado de que el estómago de los recién nacidos es del tamaño de una moneda de un euro; ¿os imagináis?. Claro, con un estómago de ese tamaño y un esfuerzo tan grande por delante para intentar crecer, pos tengo que ponerme a xuxar cada dos horas. El “economista” ya hizo su teoría económica: “pos si tiene un tamaño de un euro, le damos tres euros al día y que se coma lo que quiera”, (manguirulo). En fin, la realidad es que nací a los OCHO meses de embarazo, con 2,57 Kgs., salí con 2,35 Kgs del hospital y ahora estoy recuperando peso, por eso tengo que xuxar cada 2 horas cuando otros bebés lo hacen cada tres o cuatro.

Y por último, es que estar allí, como un pin en el pechito de mami, es una de las cosas que más me pueden relajar.

Una última observación sobre mi proceso digestivo: es increíble que alimentándome únicamente de leche materna, la cual es básicamente de un solo color, esto es blanco; pues es increíble la gama de colores y tonalidades que consigo obtener en mis caquitas: todo tipo de verdes, una amplísima gama de marrones, alguna variedad de amarillo,…Los chicos se quedan alucinados. Voy a ver si me esfuerzo un poco y consigo sacarme una caquita de coloooor……..AZUL.

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