miércoles, 12 de agosto de 2009

Concierto de música celta.

El otro finde me llevaron las noches del viernes y sábado a un concierto de música celta: en nuestro pueblo se celebra todos los años en un fin de semana de julio el Festival Intercéltico, dónde cada día tocan un par de grupos música celta; que consiste en música similar al folk; con mucho instrumento tradicional: abundan los pandeiros, violines, laudes, acordeones, flautas traveseras, zanfoñas y por supuesto LAS GAITAS.

Este año tocaron dos grupos principales: Gwendal, de la Bretaña francesa y Milladoiro, de las Rías Baixas. Me gustó más Milladoiro; Gwendal tenía sintetizador, batería, violín, travesera y bajo; Milladoiro es mucho más tradicional, tenían pandeiro, gaita, violín, travesera, laúd, guitarra y gaita.

Los chicos me despertaron a medianoche y Alehop!!, tira para el antiguo campo de fútbol. Para lo tarde de la hora fui muy risueña y contenta, (soy un espíritu alegre), y me encantó la música, bailé bastante, (en mi caso consiste en agitar mis piececillos) y no me dormí hasta estar de vuelta en casa. Fue mi primer concierto.

Pero…¿quiénes fueron los celtas?. Antes de los romanos, en la península vivían unos tipos que se llamaban Iberos; estos chicos cuando llegaron a Galicia en pleno mes de julio, vieron que hacía fresquete, llovía y había poco sol y decidieron pirárselas a clavar la sombrilla en las playas del sur, montar bloques de apartamentos a pie de playa y chiringuitos en plena arena. Entonces, como quedaba un hueco vacío, llegaron estos otros, los Celtas, y trajeron sus gaitas, sus runas, su buen hacer del vino y sus castros o poblados; viendo que aunque hacía fresquete, las playas eran bonitas, el mar estaba lleno de buen marisco y los precios eran más baratos, decidieron quedarse.

De ahí que ahora seamos parientes de los irlandeses, escoceses, galeses, bretones, de los de la Isla de Man y los de Cornualles. Probablemente tengamos algún antepasado puramente celta, cosa que al abuelo Ramón no le va a gustar nada, porque él es del Depor; (de todos es conocida la rivalidad Depor – Celta).

5 comentarios:

María José dijo...

Qué suerte la tuya Inés. Yo tengo que aguantar todas las santas noches otra clase de concierto, el de las voces de los zumbaos que visitan el pub de enfrente de casa. Y dime tú a mí la gracia que te hace que a las 3 de la mañana se saluden tocando el pito de los coches, o que los arranquen con la música poligonera a toa pastilla. Mucho mejor el sonido celta, ande va a parar.
Y dices que es todos los años? Mmmmmm, se lo comentaré a mami que le gusta esa música...

Por cierto, los íberos siguen abundando por el sur. Algunos parece que no han evolucionado desde hace miles de años...

Besitos bella dama.

NuBadi dijo...

Pero está niña es fiestera, como es eso de levantarse a media noche para irse de concierto!
Muero de la simple y llana envidia!

Realmente hermoso que tengan esas oportunidades de disfrutar y pasarla bien. Es un mundo maravilloso para Inés

cricri dijo...

Qué suerte Inés!! A mí me encanta la música Celta y a Óliver también!! A nuestro barrio vinieron los Gwendal una vez y me gustaron, pero los tradicionales son mucho mejores...es música de bailar dando saltitos cómo dice Óli

Jessica dijo...

Oye Inés pero que barbaridad eso de andar madrugando para ir a conciertos no lo he hecho ni yo en mis 35 años y mira cuanta ventaja me llevas.

A mi también me gusta la música celta lástima que por nuestros rumbos no haya ese tipo de conciertos.

Besitos preciosa

Àlex dijo...

Conciertos de media noche? INés, que de juergas ya tenemos varias pendientes pero eso de que te vayas de conciertos sin mi.... mmm... Tendremos que ponernos al día pronto!

Concierto fue el que yo dí en el avión... jaja, si los pobres del vuelo Madrid-Miami todavía se acuerdan de mi... NO fue tan armónico como al que fuiste tu, eso no, pero seguro que para los pasajeros fue igual de memorable! :-)

Besitos guapa!