Se abre ante los “chicos” un maravilloso universo de colores, a pesar de que no saben si ese universo es rosa o azul; hay que hacer cantidad de planes.
- Mami ya piensa en el cochecito, en la cuna, en que hay que ponerle la habitación, la ropita, que necesitaremos una bañera y los biberones, que seguro le damos pecho que es lo más sano, necesitará un armarito para sus trapitos, y mami cremas para evitar las estrías, me gusta el Bugaboo, a ver si en la próxima eco sabemos el sexo para poder elegir todas esas cosas…
- Papi piensa en cómo irá mami el día señalado al parto, si irá corriendo a parar una ambulancia, que tienen su base cerca de casa; si llamará y cogerá un taxi; si él saldrá de trabajar zumbando por la autopista, cogerá a mami en casa e irán volando para el hospital, teniendo a Inés en mitad del trayecto,… (papá a veces es un poco raro, no sé si lo había dicho)…
Lo único que es cierto es que se abre ante los “chicos” un maravilloso universo de colores, y nacen ante ellos las mayores ilusiones que nunca han tenido.
Aaaaah!! Y a la única que le trae sin cuidado el sexo es a la abuelita Adela, ella hace faldones, baberos, jerseycitos,…todo AZUL, no le gusta el rosa y tanto si es niño como si es niña, el “merchandising” será AZUL; (mami y papi intentarán con poco éxito inculcarle otras alternativas como el color crema, el amarillo o un verde pálido,…el rosa saben que no se contempla).
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