Ese señor panzotas y barbudo, de pelo blanquíiisimo y de tradición de origen nórdica, (aunque los americanos se la quieran apropiar, como de todo); y que la Coca-Cola vistió de rojo y blanco, ha pasado por casa.
No sé si es preferible la antigua tradición hispánica, en algún aspecto sí. Los Tres Reyes Magos son tres y por lo tanto pueden traer mayor cantidad de regalos, pero por otro lado llegan con tanto retraaaasooo;…los camellos deben de ir a gasoil, todo lo contrario que el Rudolf ese, que es un alce biturbo, con ocho válvulas por cilindro y llega la noche del 24 de diciembre, mientras que los otros Tres vienen la noche del 5 de enero, cuando ya gasté todos los juguetes que me trajo Santa Claus, (San Nicolás o Papá Noel).
Luego está el tema de la elección de los regalos; que ya sabemos que Melcior es muy listo, no se come el coco y trae un regalo que no falla: oro, que al que no le guste que se compre lo que quiera; luego está Gaspar, que ya empieza a ser menos espabilao, que trae incienso, que es una cosa que se quema y huele mucho, incluso algunos dicen que bien; (por mi Gaspar no es necesario que venga con esos humos) y luego está Baltasar, que juega al despiste y trae mirra, que debe ser algo que vale muchísimo, pero nadie sabe para qué sirve, (pos que se quede con Gaspar)…; sin embargo, el barrigón colorado dicen que tiene una fábrica de juguetes en Laponia, con una plantilla de duendes trabajando a doble jornada por el salario mínimo, (no sé a cuánto está en Finlandia), este sí que lo tiene bien montao.
Bueno, también cabe la posibilidad de que venga Papá Noel y luego vengan los tres Reyes Magos,…como me he portado tan bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario