miércoles, 10 de noviembre de 2010

Barbies y Heidis.

Ya he dicho por algún lado cuál es el problema de las Barbies: que vienen generalmente de una en una.

Hay otras cosas mucho más inteligentes como los Donuts, que vienen de dos en dos; los yogures, de cuatro en cuatro; o la Colacola que viene en packs de a ocho o en packs de cuatro packs de a ocho... TRENTIDOOOÓS!!!

¿Os imagináis si las Barbies viniesen de trentidós en trentidós?... se evitarían todos esos problemas de "no te dejo mi Barbie que sólo tengo una", "creo que he salido perdiendo al cambiarte mi Heidi por tu Barbie", "deshagamos el cambio y cada una las suyas", "quédate tú las gafas de sol, que yo me llevo la Barbie"...

El caso es que Laia fue buenísima conmigo y tuvo santa paciencia; que me dejó las gafas y la Barbie de Toy Story y encima yo voy y le hago lo mismo que a Àlex con el tractor y le canto un par de muñeiras bien altas...



Y por mi culpa fue por lo que se pudo quitar esta foto tan tierna. Mis chicos desearon por un momento dejarme a solas con Karina cuando hubiese acabado con Laia, (que a fin de cuentas la de los caprichitos fui yo).

Maaaaarchaaaaaa!!!.

4 comentarios:

Karina Ibarra dijo...

Estabamos "pensando", las dos. :-) jajajaja.

Laia no está acostumbrada a negociar, al fin y al cabo tiene a su hermano que no negocía ni un pelo con ella, simplemente le quita las cosas y se va corriendo, así que el proceso de "te dejo", "me dejas" fue too much para ella! jajajaja. :-)

A la próxima prometo tener un regimiento de barbies en la puerta. Con Ken incluido (2 por favor)

Anónimo dijo...

Hermosas. Pero confieso que con los rizos no logro saber si la que piensa y habla con Karina es Inés o Laia.
Esas melenas me encantan.
;)

Jessica dijo...

Yo creo que es Laia porque la veo más grande, pero también me confundí si es Inés, jejeje

En cada post que leo de esta visita quedo mas emocionada.

Leo dijo...

Bueno, a mí lo que de verdad me interesaría es que los oves vinieran por lo menos de catorce en catorce.

Que soy un chico.